Es tierno, amoroso,
de noble corazón,
piensa en mí a cada momento,
mi voz
es su melodía,
me ama y me protege,
en todo se da a mí.
Es mi mundo
y mi universo.
Es un milagro del cielo.
Es el hombre que soñé
y oré a dios.
Es mi esposo y mi vida,
somos almas gemelas
unidas por amor.
Vamos viajando
días y noches, juntos
en pensamiento, espíritu y alma,
sin que importe nada la distancia
que separa nuestros cuerpos,
que incluso hace más fuerte
nuestro amor.
Es mi esposo
un hombre lleno de bondad
y tiene todo eso que buscaba
y necesito,
yo le doy mis días
y mis oraciones,
mi corazón
pronuncia su nombre
ahí en lo más profundo. Amo
sus cualidades,
su interior.
Somos dos soñadores
viviendo el milagro
que nos unió.
Nos gustan las mismas cosas,
todo lo sentimos por igual,
es sagrado nuestro amor,
bendecido.
RAQUEL JIMÉNEZ NÚÑEZ
HÁBLALES DE MÍ CON LOS OJOS
Háblales
a tus padres de mí
con tus hermosos ojos
brillando de amor,
con la más dulce bondad,
esa que siento
en cada mirada tuya.
Háblales
con tus ojos.
Ellos expresan lo que siente
tu corazón por mí, desde el día
en que llegó el milagro
de nuestro amor.
Mi corazón palpitó
la primera vez que vi
tus ojos. Desde entonces
ellos hablan de los dos.
Son lindos tus ojos,
brillan como las estrellas
iluminando mi vida.
Dios nos unió
a pesar de las distancias.
Nos amamos con fe
y nos alimentamos de amor
y con miradas.
Háblales a tus padres de mí
con tus ojos.
RAQUEL JIMÉNEZ NÚÑEZ
VIAJANDO EN LA DISTANCIA
Voy viajando, mirando
el cielo gris
con sus nubes blancas,
pensando en ti
en este viaje corto a la ciudad,
esa ciudad que tú visitarás algún día,
muy pronto,
para así acabar con esta distancia
que tendrá su fin.
Ha pasado el tiempo
y aquí está, esperándote siempre,
mi corazón,
lo tengo junto a ti,
tú sabes quererme,
contigo encontré el amor.
Voy en la guagua
mirando esta naturaleza tan bonita,
sintiendo la suave brisa,
que es como sentir
tu voz dulce cada día,
nuestro amor eterno.
RAQUEL JIMÉNEZ NÚÑEZ
La luna detrás de la montaña
va asomándose
e iluminando tu noche
en un mundo donde sólo existen
tu presencia y mi amor,
que viaja en la distancia
a través de tu corazón.
Cada pensamiento se convierte
en vida y felicidad
con la luz más bonita,
que cada día toca y alumbra tu piel
con la suavidad del amor.
Luna, tú que lo ves
dile cuánto lo amo y lo extraño.
Es un paraíso esa tierra
con sus montañas hermosas
donde hablan de mí
sus suspiros de fe.
Allí viviremos, en ese paraíso,
con la luz de la luna.
RAQUEL JIMÉNEZ NÚÑEZ
